22 mar 2013

además de la noche


no, no creo que hayamos desarrollado una resistencia a la poética de la noche;
al contrario,
nosotros bien podríamos ser uno de sus triunfos

(me hice un puente que va desde el phármakon griego hasta the cure)

y que me hablen de felicidad
—con seguridad no hará más alegres mis alegrías,
pero quiero el placer de decir esas palabras que sólo hacen sentido de vez en cuando

encontré mi mirada para el mundo en sus contaminaciones,
y sin embargo cuesta renunciar a la posibilidad de la pura felicidad

me gusta cuando caen las vendas que cubrían al hombre invisible
del mismo modo en que me fumo un cigarrillo para posponer el hambre

1 comentario:

Victoria eremita dijo...

La noche y el además de la noche. La contaminación es el puente. los venenos del ritual, la alegría confusa. La felicidad de la que se habla, la de las vendas.

Nunca sentí un triunfo. El puente es interminable. Es el delirio del
¿dónde?